Cuidado con la guerra civil…
8. febrero 2019 | Por Padre Pedro Garcia | Categoria: Narraciones BíblicasAcababa Jesús de curar a un ciego y mudo, que pasaba por eso como un endemoniado de categoría. Las gentes se entusiasman: ¡Jamás habíamos visto cosa semejante! Este Jesús es por fuerza el Cristo.
Los fariseos, por de pronto, piensan todo lo contrario. Y expresan una opinión que Jesús la va tomar muy en serio, de tal modo que le obliga a declararla como el mayor de los pecados, llamado por el mismo Jesús “pecado contra el Espíritu Santo”, causa de condenación sin remedio…