Reflexiones

Esperanzas del Tercer Milenio

27. abril 2012 | Por | Categoria: Reflexiones

Cuando se acercaba el Tercer Milenio, todos nos preguntábamos: ¿Y cómo van a ser los mil años que le esperan ahora al mundo? ¿Buenos? ¿Malos?… Todos nos hacíamos conjeturas y todos soñábamos en que iban a ser inmejorables. Ahora, metidos ya de lleno en el soñado 2.000, estamos empeñados en convertir los sueños en realidades. Sueños que expresó muy bien el Arzobispo Primado Católico de Inglaterra, el cual decía que debería el mundo empeñarse en alcanzar diez metas para conseguir un Mundo Nuevo…



Dios: desvíos y orientaciones

20. abril 2012 | Por | Categoria: Reflexiones

Estamos todos convencidos de que Dios ha de volver al mundo para ocupar el lugar que le corresponde. El primero, el principal, y no el último rincón, porque Dios ha de llenar todo en todas las cosas. El que la sociedad rechace a Dios no quiere decir que Dios pierda ninguno de sus derechos. Al contrario, hace que Dios los reclame cada vez con más fuerza. Dios nos ama, y no puede tolerar que el enemigo lo desplace y le arrebate esas almas que Él creó para la salvación y no para que se pierdan…



Negar a Dios con elegancia

13. abril 2012 | Por | Categoria: Reflexiones

¿Existe Dios?, pregunto para empezar. Y la pregunta me la sugiere el caso leído en cierta revista sobre un accidente espantoso de tránsito en plena carretera. El auto quedó destrozado. El conductor, en estado gravísimo, fue llevado con urgencia al hospital. La esposa, también maltrecha, fue tendida en otra cama. Se reúnen en torno a ella los familiares más íntimos, y uno de ellos le dice a la paciente…



Nuestra grandeza moral

6. abril 2012 | Por | Categoria: Reflexiones

Al leer la Biblia nos encontramos con una escena dolorosa entre Isaías y el rey Ezequías. El profeta se presenta ante el rey, tumbado en su cama donde ha caído enfermo, y le dice sin más explicaciones:
– Prepárate y arregla todas tus cosas, porque no vas a curar y morirás sin remedio.
El pobre rey, hecho un mar de lágrimas, vuelve la cara hacia la pared y se dirige a Dios entre sollozos incontenibles…