Reflexiones

¿Y dónde estuvo Dios?…

4. marzo 2011 | Por | Categoria: Reflexiones

Nos propusimos con nuestro Programa el llevar noticia de Dios a muchos hermanos nuestros. Lo hemos llamado desde el principio ESTOY PENSANDO EN DIOS, y en el mensaje primero expusimos claramente nuestro pensamiento: pensamos en Dios porque lo amamos, y porque lo amamos lo queremos meter en todas partes. Queremos que el Dios que va a ser el Dios todo en todos durante la eternidad, lo sea ya también ahora, en el mundo que habitamos, sin esperar al mundo futuro…



El dinero, ¿para qué?…

25. febrero 2011 | Por | Categoria: Reflexiones

Cuando se nos habla de dinero, de plata, pronto se nos ponen bien atentos los oídos. ¿Por qué será?…
Es bien conocido ese dicho de que todo obedece al dinero. El dinero mueve, sostiene y prospera todas las obras humanas. Sin dinero no se hace nada en el mundo.
Cuando se proyecta una obra, lo primero que se hace es el presupuesto, y después, sin que nadie se exima de esta regla, viene el modo de financiación. Las cosas son así, y no las sabemos cambiar…



¿Carácter?… Como el de Jesús

18. febrero 2011 | Por | Categoria: Reflexiones

Todos sabemos que en la pedagogía moderna se le da mucha importancia a la formación del carácter. Sin un carácter bueno, sin un carácter firme, sin un carácter constante, hay muy pocas esperanzas —mejor dicho, no hay ninguna esperanza— de que el joven o la muchacha sean el día de mañana unas personas de valer. Serán vulgares, lo cual es una pena. Pero un temor como éste nos favorece muy poco. Por eso, nos proponemos ofrecer algo para la formación del carácter, no solamente el de los jóvenes, sino el de todos, porque todos tenemos que mejorar una de las cualidades que más nos pueden honrar y más nos pueden hacer rendir en la vida. Esto que ofrecemos en nuestro mensaje de hoy es nada menos que Jesucristo…



Testigos

11. febrero 2011 | Por | Categoria: Reflexiones

Los que decimos tener buena voluntad, y queremos ser cristianos de veras, nos hemos empeñado hoy en formar un mundo nuevo, el mundo mejor. ¡Como quien no dice nada! Es una empresa de titanes…
Porque, para construir ese mundo nuevo, es cuestión de remover todas las cosas desde sus cimientos: eliminar el mal e implantar el bien; meter a Dios allí de donde hubo de ausentarse por malicia de los hombres, y echar al enemigo del puesto donde se impuso un día como soberano…